martes, 2 de julio de 2013

Envidia

     La envidia es la religión de los mediocres.

Los reconforta, responde a las inquietudes que los roen por dentro, y, en último término, les pudre el alma y les permite justificar su mezquindad y su codicia hasta creer que son virtudes y que las puertas del cielo sólo se abrirán para ellos, que pasan por la vida sin dejar más huella que sus trapaceros intentos de hacer de menos a los demás y de excluir, y a ser posible destruir, a quienes, por mero hecho de existir y de ser quienes son, ponen en evidencia su pobreza de espíritu, mente y redaños.

     Bienaventurado aquel al que ladran los cretinos, porque su alma nunca les pertenecerá.


2 comentarios:

PALOMA dijo...

Mala compañia la envidia ,mejor dejarla siempre de lado ...

Un besico Kelpye .

Kelpye dijo...

Pues desgraciadamente si, dejar la envidia de lado y las paersonas envidiosas también. un beso