viernes, 27 de junio de 2014

27 - 6 - 2014

      A veces es tan difícil mantener la calma, el sosiego. 
Para que me sirven las ilusiones si luego se desvanecen como si nada y me queda el ahogo y el congojo...
Confio en algo y se esfuma, mientras, se me encoge el estomago, se me cierra la garganta, siento una tristeza profunda y una pena que no me deja ver mas alla seguramente.
No entiendo el sin sentir de la vida.

domingo, 1 de junio de 2014

1-6-14

      Cuanto mas gruesa es la armadura, mas frágil es el ser que la habita.

      A veces necesitamos ese caparazón, pero, no es mejor dejar libres los sentimientos para que no nos ahoguen?
      Siempre decimos que lo que nos guardemos dentro nos hace daño, pero más daño nos hace las actitudes de la gente que no ve mas allá de sus pestañas. Ese si que es un daño que nos hacen a nuestra alma y que es muy difícil de controlar. 
      Luego con una sonrisa o un guiño, ya esta la cosa solucionada, y no, no es así, es como cuando cogemos el folio en blanco y lo arrugamos, ya no vuelve a su posición normal, lisito, pues igual con nuestro pequeño corazón, no vuelve a la normalidad.